18 enero, 2013

Todos los días



Hoy amanecí con unas ganas locas de escribirte mi amor, aunque nunca me leas, aunque nunca me veas...

Al fin y al cabo lo de escribirte es un vil pretexto pero hay algo que no entiendo; porque escribirte si en lugar pudiéramos estarnos besando? porque sufrir? si en lugar pudiéramos estar amándonos. El destino no nos cree amor y tan solo somos sus víctimas, nos lleva por los caminos donde no deberíamos ir. El destino es cruel aunque todos piensen lo contrario, no me subestimes por eso.

Hoy amanecí con tu olor en mi almohada, anoche le hice creer a mi conciencia que era tú y así dormimos juntos. Sabes? también todas las mañanas me levanto pensando en ti  te hago el desayuno, te lo llevo a la cama, juegas con mi cabello, te gusta hacerme enojar...volamos.

Todos los días soñando con tu piel y tu aroma no lo sabes pero te duermes sobre mi pecho como un niño que le tiene miedo a la oscuridad y de pronto no existe el mundo, el aire, tu piel dentro de la mía confundida en el éxtasis de la locura...

Usted me gusta desenfrenado,agitado,sudoroso a mi lado.
Usted me desafía y así enloquezco, muero, revivo en la palma de su mano derecha.
Usted se consume cuando le beso la frente, la espalda, los pómulos...

Somos un amanecer en la playa, somos la locura de los 20 años, somos lo que nadie quiere darse cuenta.

El amor existe, tú existes.